lunes, marzo 15, 2010

Apariencias construídas y realidades


(clic en la imagen para ampliarla a 900 x 600 píxeles o verla aún más grande). Puede parecer de día, sin embargo es de noche. Puede parecer que esos prodigiosos rayos anaranjados provienen del Sol poniente, pero en realidad son nubes finas iluminadas por la Luna que se decoloran a medida que descienden hacia el horizonte. Puede parecer que las nubes densas vistas cerca del borde izquierdo de la imagen están formadas por muchas capas, pero de hecho se trata de algunas nubes aisladas que fueron registradas en numerosas exposiciones independientes.

Sin embargo hay algo verdadero en la imagen de hoy: es una secuencia de fotografías tomadas a intervalos fijos durante más de dos horas desde Sunión, en Grecia, hace un par de semanas. También son verdaderos los trazos estelares que giran alrededor de Polaris, la brillante estrella polar, hacia la parte superior derecha de la imagen. ¿Pero qué pasa con la edificación en primer plano? Como estamos en Grecia, puede parecer una construcción antigua y famosa, pero en realidad se trata de una pequeña iglesia abandonada construída en el último siglo.

Vía Foto astronómica del día correspondiente al 15 de marzo de 2010. Esta página ofrece todos los días una imagen o fotografía del universo, junto con una breve explicación escrita por un astrónomo profesional. Crédito y copyright: Chris Kotsiopoulos.

En la noche del 25 de enero de 2007 la luz del primer cuarto de la Luna iluminó este paisaje de ensueño y reveló la accidentada perspectiva ofrecida por las cumbres nevadas de los Montes Elburz, al norte de Irán (clic en la imagen para ampliarla, o verla mucho más grande). En este cielo excepcional, rebosante de estrellas, se destaca el amarillo anaranjado de Betelgeuse, en el hombro de la Constelación de Orión. Sirio, la estrella no sólo más brillante de la Constelación de Canis Major sino también de todo el firmamento terrestre, se encuentra arriba y a la izquierda del centro de la fotografía. El resplandor sobrenatural que corre en el primer plano a lo largo del Valle de Haraz no es otra cosa que la luz de los faros de los vehículos que circulan por la ruta que conecta Teherán con el Mar Caspio. Crédito y copyright de la imagen: Babak Tafreshi. Más información (en inglés).

Nota: Una traducción más literal del título habría sido Rastros de nubes iluminadas sobre Grecia. Sin embargo, dado el enfoque del blog, me pareció más interesante resaltar, mediante otro título, el juego entre las apariencias artificiales debidas al montaje de las exposiciones y el aspecto del paisaje tal cual lo captó la cámara fotográfica. Otras entradas que tratan de lo engañosa o superficial que puede ser la primera mirada o una observación apresurada son: Sobre lo efímero y lo eterno, en la que hay una marcada contraposición temporal, y La Luna en el Río Mullica, que pone de manifiesto que casi todo lo que se ve en la imagen son reflejos de una fuente invisible.